PNP advierte riesgos y solicita que el Universitario vs Sporting Cristal se juegue con público

Una sorpresiva solicitud ha encendido el debate en el fútbol peruano. La Policía Nacional del Perú (PNP), a través de un oficio formal dirigido a la Comisión Disciplinaria de la Liga 1, ha pedido que el esperado clásico entre Universitario de Deportes y Sporting Cristal, por la fecha 14 del Torneo Apertura, se juegue con la presencia de público en las tribunas.

Contrario a lo que se esperaba tras la sanción impuesta a Universitario —que contemplaba disputar el encuentro sin hinchas en las graderías—, la PNP sostuvo que cerrar las puertas del Estadio Nacional podría agravar el escenario de seguridad, debido a la magnitud del evento y la alta expectativa generada.

“Esta medida, lejos de mitigar los riesgos, representa un serio peligro para el orden público y la seguridad ciudadana, ya que se habían vendido más de 40 mil entradas”, señala el oficio N.° 478-2025 remitido por la Dirección de Seguridad de la Policía.

En su análisis, la institución advierte que prohibir el ingreso del público podría provocar la aglomeración de hinchas en los alrededores del estadio, incluso de ambas barras, generando un entorno mucho más complejo de controlar.

La posición policial ha encontrado eco en Jean Ferrari, administrador de Universitario, quien días atrás expresó en redes sociales que jugar a puertas cerradas no resolvería el problema de fondo. “¿Qué pasará cuando se junten ambas hinchadas afuera del estadio?”, cuestionó el dirigente crema, una postura similar a la de la PNP en el documento oficial.

Asimismo, la Policía dejó en claro que, de mantenerse la restricción de acceso al público y en caso se generen disturbios, la responsabilidad recaerá exclusivamente sobre las autoridades deportivas que tomaron dicha decisión.

“El repentino cambio podría generar reacciones imprevistas no solo entre aficionados del club sancionado, sino también de otros equipos”, concluye el informe.

La Comisión Disciplinaria aún no ha emitido una respuesta pública. Mientras tanto, crece la tensión alrededor de un clásico que, más allá de lo deportivo, se ha convertido en un tema de seguridad ciudadana.